El oído es uno de los sentidos que se desarrolla primero, por lo que se ha planteado el trabajo con estímulos sonoros incluso antes del nacimiento.
Los primeros años en la vida de un niño son una etapa fundamental y realmente importante para su aprendizaje y su futuro. Es donde se establecen además relaciones de apego con padres o familiares, la música funciona como un vehículo para contribuir en este vínculo.
Cuando se le habla a un niño pequeño, generalmente se ajusta la voz con un tono más suave, es decir más musical. Desde este momento la música, los sonidos, y el ritmo están tomando un papel importante para el desarrollo del niño en todas sus áreas.Ya desde hace varios años, la música se utiliza como método terapéutico o estimulador por sus efectos sobre el estado afectivo y atención de las personas.
Son muchas las investigaciones que hablan del efecto de la música sobre el cerebro de los niños, esta provoca una activación de la corteza cerebral, sobre todo en las zonas frontal y occipital. Lo anterior trae beneficios en la capacidad de memoria, atención, concentración, habilidad matemática.
La música nos ayuda a expresarnos. Ayuda a los niños a identificar sonidos y significados de palabras, estimula la creatividad y la imaginación, enriquece el intelecto.
La estimulación musical se realiza con actividades diversas que involucran el movimiento, la percusión corporal, los gestos, la expresión vocal, los dibujos, los colores, el juego.
“Si un niño se aficiona a escuchar y a aprender música desde pequeño, hay muchas posibilidades de que además de desarrollar mejor sus facultades superiores y por tanto, llegue a ser más inteligente, también se haga mucho más ordenado y metódico”
Por todos lo anterior y muchos otros aspectos, la música representa un papel importante para la enseñanza y aprendizaje de los niños en sus primeros seis años de vida. Estimule a su hijo a través de la música!
